A todos nos ha tocado, hacemos un trato con alguien y las condiciones del mismo no se cumplen, porque a veces al compadre le dan ganas de echarnos atole con el dedo, y pues nos toca poner cara de león y pelear por lo que nos toca. Ahora, ¿qué pasa cuando tienes una empresa? Pues no siempre se respetan las condiciones, y a veces lo pactado no es lo obtenido. El vendedor no recibe su pago en la forma que quería, el comprador no obtiene lo que esperaba a cambio de su plata y nadie se va a casa feliz.
Muchas veces las empresas no entran en tratos unas con otras por este tipo de problemas. Pero hay una solución bastante elegante y sencilla de conseguir: poner a un banco como intermediario. BanRegio está dispuesto a meterse al ring de los negocios en tu favor y a favor de la otra parte del trato con una Carta de Crédito. Este sencillo documento hace que el banco respalde el trato y evite que ninguna de las dos partes se eche para atrás y deje el contrato a medias o afecte a la otra parte de manera negativa.
