HSBC cuenta con una banca fuerte para personas individuales y negocios por igual. En el ámbito de los negocios, este gran banco internacional juega siempre con los peces más gordos. Aquí casi no entran las PYMES, o al menos no para los mejores beneficios que se pueden obtener en el banco. Muchos de sus productos empresariales están orientados a la protección de los puntos débiles de las grandes empresas de hoy.
En concreto, estoy hablando de un producto financiero que me llamó bastante la atención, el Seguro de Vida Keyman, o aseguranza para personal clave en una empresa. Es algo así como un seguro que puedes contratar para tu contador, así si le pasa algo el banco no solo apoya a la familia del fulano sino también le echa la pala a tu empresa para que salgas del bache y logres llenar esa plaza de manera efectiva y fácil. Obviamente no es algo así de sencillo, pero el ejemplo es para que te des una idea de cómo funciona. Esto, sin dudas, es más para empresas bien formadas. Es posible que no tengas una, o es posible que sí, como no lo sé desde aquí, vamos a darle un vistazo a este interesante paquete de seguros.
Para los meros meros
El seguro Keyman está pensado para asegurar al personal clave de una empresa, o al menos al personal selecto de la misma. El dueño de la empresa, o sea tú, elige a quién va a cubrir con este seguro y a quién no va a cubrir. Primero, la selección hace fácil el pago del mismo, porque desde ya te lo digo: no es barato el segurito. El seguro efectúa adelantos en caso de enfermedades terminales, pago de coberturas por infartos al miocardio, invalidez o cáncer. ¿A quién le pagan la plata? Pues a la empresa. Suena como algo frívolo, pero esto se trata de proteger a una compañía del posible impacto económico que tenga al perder a un presidente de la junta directiva, por ejemplo.
El seguro también te da flexibilidad para asegurar a tus empleados, es decir, tú eliges el monto por el cual quieres asegurar a tu gente, o sea, tu dictas cuánto vale cada uno de los jugadores clave en tu equipo, de nuevo suena frívolo, pero estamos hablando de la protección que pueda necesitar tu empresa, así que no te sientas mal si Susy la de mercadotecnia vale solo $100,000 pero Don Meme de compras vale $450,000, todo depende del rol que desempeñe cada uno y su importancia para la continuidad de tu negocio. Obviamente entre más alto el monto, más caro te sale pagar cada mes por el seguro.
Lo bueno y lo malo
El seguro es totalmente deducible de impuestos, y si tienes una empresa sabes que esos deducibles son la diferencia entre la vida y la muerte… o bueno, al menos te ahorras unos pesitos cuando te toca declarar y eso es lo que vale. En caso de fallecimiento accidental de uno de los asegurados te pagan el doble del monto asegurado y si es un accidente masivo, te pagan el triple por cada asegurado fallecido.
Después puedes ir personalizando el seguro con coberturas como cáncer, infartos, invalidez, etc. Puedes contratar el seguro con moneda nacional o los famosos dólares, lo que escojas. Eso sí, solo tiene cobertura en el territorio nacional así que si alguien cuelga los tenis en un viaje de negocios por Europa, pues ya te amolaste. Además, el seguro no ampara a nadie más que a tu empresa por lo que siempre es bueno promover entre tus empleados la contratación de un seguro individual. ¿A quién asegurarías en tu empresa? Comenta y comparte.
