Cuando manejas muchas tarjetas de crédito el riesgo es deber lana en todas ellas o en varias de ellas, pues cada tarjeta normalmente aplica más interés cuando la deuda empieza a atrasarse y cuando los montos no son tan altos. Esto puede ser un escenario bastante sombrío para muchos, y pues suele pasar que en ese punto empiezas a pagar las que tienen menos saldo y las de más saldo se acumulan, dañando tu récord crediticio y alejándote de, por ejemplo, conseguir una hipoteca para tu casa propia o financiamiento para tu coche.
En estos casos, lo mejor es tratar de unificar tus deudas en una sola tarjeta, usualmente puedes unificar deudas con un banco en donde ya tienes una, y tratas de que absorba las demás, el problema es que la deuda que tienes con ese banco acaba de crecer y es posible que ya hayas estado en mora con ellos también. ¿Otra opción? Santander tiene una buena propuesta con su Transferencia de Saldos Santander. Un servicio que te deja transferir tus deudas de otras tarjetas a Santander de manera sencilla, y lo mejor del caso es que no tienes que tener una deuda activa con ellos.