Las empresas también tienen emergencias de dinero, no solamente las personas individuales. Así como a ti se te puede acabar la plata para pagar la luz porque de plano tenías que comprarte eso que tanto querías, y tienes que pedir un préstamo de consumo, así también las empresas tienen a veces que incurrir en préstamos de corto espectro para cubrir necesidades o emergencias súbitas. Desde un mal cálculo en un flujo de efectivo que te hace pensar que puedes pagar más mercancía de la que en realidad que podías, hasta para suplir los costos del día a día de tu empresa. Es en este caso donde tienes que pedir prestado.
Peor los bancos no enfocan este tipo de créditos para las Pymes, usualmente las empresas piden prestadas cantidades grandes a muy largo plazo para acrecentar su capital de trabajo o comprar activos fijos. ¿Qué hacer cuando se necesita solvencia rápida? Muchos recurren al factoraje y demás opciones, pero cuando simplemente necesitas plata de manera rápida para tu empresa, muchas veces vas a tener que sacarla como persona física individual. Pero hay otras opciones, como el crédito Comercial Mifel, que está orientado a empresas de cualquier tamaño.
Un préstamo para las necesidades empresariales.
El préstamo te ayuda a obtener dinero rápidamente en menos de 72 horas puedes obtener un préstamo por hasta $75,000 que es bastante bajo para una Pyme pero que te puede sacar de apuros y suplir tus necesidades de tesorería, cubriéndolas de manera inmediata. El préstamo tiene un 1% de comisión por apertura y el CAT es de 23.2%, algo un poco más alto que el préstamo promedio de Pymes y que el préstamo promedio en Mifel también. El límite de crédito depende mucho de tu línea de crédito con Mifel; sí, necesitas una tarjeta de crédito para obtenerlo y tener una cuenta corriente con ellos también.
El crédito no tiene un destino específico sino que está diseñado para suplir las necesidades de tu empresa, las más inmediatas. Puede ser desde la reparación de alguna pieza de equipo hasta ajustar para pagar los bonos navideños, tú eliges que hacer con el dinero, incluso puedes comprar activos con la plata, así que no tienes que presentar cotizaciones o algo así al banco. Puedes sacar el crédito por hasta 5 años, o por seis meses que es el mínimo para terminar de pagarlo.
Empresa solvente
Tu empresa tiene que estar solvente en todo sentido, no tener cuentas atrasadas por más de dos meses, no tener pérdida en los estados financieros de los últimos seis meses y no tener ningún pendiente atrasado en el fisco. Tampoco puedes tener otro préstamo cuando acudes a este, excepto si el préstamo es dentro de Mifel.
La tasa de interés es variable pero no hay penalizaciones por pago anticipado, y eso significa que tu tasa de interés puede ir bajando conforme reduzcas el capital adeudado. En general la opción es bastante buena pero solamente para salir de algo a corto plazo, para meterle capital a tu empresa es mejor que busques otra opción. Comenta y comparte.