Imagina que tu empresa necesita plata, pero no tienes liquidez, eso sí tienes una lista enorme de clientes que te deben lana, pero no puedes ir y cobrarles porque todavía tienen tiempo para pagarte. Además pelearte con tus clientes por plata es muy mala política para hacer negocios, entonces ¿qué haces? Aquí entra el factoraje, le cedes a un banco los derechos de tus cuentas por cobrar a cambio de liquidez, es decir, el banco va a cobrar tus deudas y tú recibes plata en efectivo. Y eso es todo.
Ahora el factoraje es una decisión difícil de hacer, ya que el banco va a estar encima de tu clientela para obtener la plata de vuelta, además que no te van a dar el 100% de los derechos de tus cuentas por cobrar, sino solo una parte, ya que algo tiene que ganar el banco de todo esto. Sin embargo puede ser una decisión factible con el banco correcto. Afirme es una opción bastante aceptable, principalmente con el trato para cobrar tus cuentas, ya que no le van a cobrar a tus clientes sino que se arreglan todo contigo.
Factoraje diferente
El factoraje con Afirme funciona de manera diferente que con los demás bancos. Te dan hasta un 83% de los derechos de tus cuentas por cobrar, tienes que presentar los documentos formales, ya sea copias de los pagarés o proformas pre fechadas, y estas pasan a ser propiedad del banco, PERO tú las cobras a tus clientes, así que no es necesario que nadie se enteren de que tu empresa necesitaba efectivo inmediato para que no te corten la luz, por ejemplo. Además esto te ayuda a no tener que perder contacto con tus clientes.
La otra ventaja es que te dan hasta 45 días después del plazo de vencimiento de cada pagaré para que devuelvas la plata al banco sin necesidad de que te cobren moras y recargos. Tampoco te cobran comisiones por adquirir el servicio y en caso de que no logres cobrar tus cuentas el banco te apoya con un servicio de cobros morosos, que por supuesto no es gratis, pero el cobro se recarga a tus clientes morosos y no a ti.
Hay mejores
Eso sí, hay factorajes un poco menos amistosos en cuanto a contacto con clientes, pero con mayores porcentajes a cambio de tus derechos de cuentas por cobrar. Un 95% es el estándar y te desembolsan en 12 horas o menos en otros bancos, sin embargo Afirme te desembolsa en por lo menos 72 horas después de que se apruebe el factoraje. Además de que el porcentaje es mucho menor con Afirme, por lo que te dan mucha menos plata y se tardan más.
Esto puede valer la pena para ti si quieres mantener a tus clientes lejos del banco y cobrar con toda la calma del mundo y poder contar con respaldo del banco para recuperar alguna cuenta que sea muy difícil de cobrar. Es recomendable para empresas medianas y pequeñas, pero para una gran empresa no es tan factible. Comenta y comparte.
