Hay bancos que te ofrecen comprarte un coche para tu empresa arrendándolo primero, o equipo de oficina. Pero muchas veces lo que necesitas comprar es un bien inmueble. Los inmuebles son otro rollo, comprar uno muy grande puede hacer que tu flujo de efectivo se vea afectado mes a mes. La otra opción es alquilar el lugar, rentar un inmueble es como tirar lana en un saco roto, vas a pagar toda la vida y jamás te vas a quedar con nada, pero parecer ser la única opción para tener un techo para tu iniciativa de negocio.
Pero quizá no es así. Mifel tiene una buena opción de arrendamiento de inmuebles, esta es una opción de leasing bastante especial, porque al culminar el plazo de renta puedes optar por comprar el inmueble, pero le sustraen todo lo que has pagado en alquileres todo el plazo de la renta, esto te ayuda de varias maneras. Primero no tienes que desembolsar nada, no tienes las ataduras de una hipoteca en tus libros contables y no tienes que pagar mensualidades altas para comprar el inmueble. Esta opción es bastante flexible y te ayuda a comprar un inmueble a tu conveniencia.
Compra tu inmueble alquilando primero
Lo que ocurre es lo siguiente, consigues un inmueble, negocias un precio pero luego el banco lo compra para ti. Mifel adquiere el inmueble y luego te lo renta a ti. El asunto aquí es que vas a rentar con intenciones de compra, así que no hay depósitos ni aseguranza de riesgos de tu parte para poder ocupar el lugar. El asunto positivo aquí es que los arrendamientos pueden durar lo que elijas, luego al terminar el arrendamiento puedes escoger comprar el inmueble o alquilar otro periodo, así compras el lugar ya que estás en la posición de hacerlo. Usualmente se te vende el inmueble por un valor simbólico cuando terminas el periodo de arrendamiento y ya estás en donde quieres: con techo propio sobre tu negocio.
El leasing puede ir desde 5 a 20 años, en cualquier momento puedes parar y solicitar la compra del inmueble por el valor restante o un valor simbólico si ya has cubierto el precio que estipula Mifel para la compra. Las cuotas de tu leasing dependen mucho del tiempo que vayas a tardar arrendando antes de tirarte al agua y comprar y de cuanto valga en realidad el inmueble.
Los requisitos
Además de la papelería de tu empresa, incluyendo RFC y acta constitutiva, se te piden tres ejercicios fiscales y el del corriente año, además de los estados financieros de tu empresa de los últimos dos años y, muy importante, la cotización del inmueble que vas a meter en el trato.
Puedes optar por adquirir uno de los que el banco tenga a su disposición, y eso hace más ágil el trámite, pero normalmente vas a querer buscar tu propio edificio, que se adapte bien a las condiciones que tiene tu negocio. Si lo haces así, es posible que tome un poco más de tiempo porque va a depender de quien vende el edificio que tan rápido y bien se cierra el trato. Comenta y comparte.